Según la octava edición del estudio de inserción laboral llevado a cabo por la Agència per a la Qualitat del Sistema Universitari a Catalunya (AQU), el escenario es optimista para la gente que apuesta por mejorar su formación.
Anna Prades, jefe del Área de Internacionalización y Generación de Conocimiento, explica: «la inversión en formación compensa. El porcentaje de ocupación y los salarios medios aumentan con la educación. Además, se reducen las funciones no cualificadas en el caso de másters y doctorados».
Tener estudios superiores favorece el acceso al mercado laboral y mejora la ocupación y, en consecuencia, protege a las personas del paro.
El estudio detecta que el nivel de satisfacción con la titulación cursada se ha estancado y que hay un déficit de formación en competencias comunicativas ante las necesidades laborales.
El inglés sigue siendo la principal competencia a mejorar, seguido por la expresión escrita y oral. Además, pone en valor que los másters son una gran fuente de atracción y retención de talento.
(Fuente: diario Ara)